A veces las olas no me regalan su blanco beso de espuma
su blanco instante,
olas sin ruido que en esta noche me arrullan .
A veces.
A veces las nubes no quieren darme su dulce beso de lluvia
su dulce exceso,
nubes del alma que en esta noche me injurian.
Tormenta y rabia
que muerden las arenas y el coral
que hay en mi pecho.
Tus ojos quietos
tus ojos que ya no quieren llorar,
y este tumulto de nada
que en mis manos atesoro por si lo quieres mirar.
A veces.
A veces las olas, en la playa, rompen sin gritar.
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2 comentarios:
white @ 0:54 | 26/04/2005 | link permanente
Y a veces encuentro letras como las tuyas donde acariciar el alma ávida, hambrienta de palabras que saciarán su sed de pasión.
Jaime @ 15:36 | 26/04/2005 | link permanente
Muchas gracias, White, por pasar por aqui y por dejar tus palabras... A veces son tan necesarias...
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